Cofundador y pasado presidente de Nuestra Escuela, entidad que creó en el año 2000 junto a su esposa, la también educadora Ana Yris Guzmán Torres. Desde Nuestra Escuela, Justo aportó a la construcción de un mejor Puerto Rico estimulando en sus estudiantes el deseo de crear un ambiente de paz.
Su visión social ha sido fundamental en el desarrollo de una política pública que promueva servicios educativos holísticos a los jóvenes, así como en la construcción de la Alianza para la Educación Alternativa de Puerto Rico. Asimismo, ha gestado política pública dirigida a ampliar las opciones educativas de los jóvenes, como el proyecto CASA y la Ley Habilitadora para la Educación Alternativa en Puerto Rico.
Justo ha sido honrado con importantes distinciones en reconocimiento a su trabajo a favor de la educación.